Frente a las obligaciones de hacer, que tienen por objeto una prestación positiva, las obligaciones de no hacer consisten en que el deudor se abstenga de realizar una determinada conducta (prestación negativa).
- Ejemplos de obligaciones de no hacer
Por ejemplo, la obligación accesoria impuesta al arrendatario de no introducir animales en el inmueble alquilado, la sumida por una persona a través de un acuerdo de confidencialidad de no desvelar la información reservada, o la que dimana para el trabajador del pacto de no concurrencia con el empresario, una vez extinguido el contrato laboral. Como las obligaciones de hacer, tampoco pueden ser perpetuas.
- Las obligaciones de no hacer, según la doctrina
La doctrina considera obligaciones de no hacer no sólo aquellas cuya prestación es la mera inactividad del deudor, tales como las citadas anteriormente, sino también esas otras en las que el deudor se compromete a tolerar una determinada conducta del acreedor sin oponerse, como pueda ser la de permitir que su ganado paste en la finca propia.
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Fuente:
Manual Derecho Civil, Alfonso González.
